El ala cerrada de los Ravens, Mark Andrews, se fracturó el peroné y sufrió daño en el ligamento del tobillo izquierdo durante un partido del 16 de noviembre contra los Cincinnati Bengals. Menos de nueve semanas después, Andrews participó plenamente en la práctica de Baltimore el miércoles, manteniendo viva la posibilidad de que el tres veces seleccionado al Pro Bowl juegue en el partido de playoffs del sábado contra los Houston Texans.
«Creo que así es como me siento al final del día», dijo Andrews en sus primeros comentarios desde que sufrió la lesión en la Semana 11. «Sólo saber lo bueno que es este equipo, lo buenos que son nuestros jugadores, lo buenos que son nuestros alas cerradas». «Si siento que voy a ser útil para el equipo, iré. Si siento que estoy cerca pero no ahí, dejaré ir a esos muchachos y espero conseguirlo el próximo fin de semana».
Cuando Andrews se lesionó por primera vez, el entrenador de los Ravens, John Harbaugh, mantuvo la puerta abierta para que regresara esta temporada, pero dijo que sería necesario que Baltimore hiciera una carrera profunda en los playoffs. Andrews, que fue operado el 21 de noviembre, volvió a entrenar de forma limitada el pasado viernes. Fue restringido nuevamente el martes antes de ser ascendido a participante de pleno derecho el miércoles.
Andrews dijo que hizo todo lo posible, incluido pasar tiempo en una cámara hiperbárica que tomó prestada de la casa familiar de su novia, para acelerar el proceso de recuperación.
«Esos muchachos tenían un plan juntos para mí», dijo Andrews. «Todo lo que tenía que hacer era venir aquí todos los días y trabajar y mejorar. Ha mejorado mucho semana tras semana. Hemos progresado mucho».
Andrews, de 28 años, ha sido uno de los alas cerradas más productivas de la NFL cuando está sano. Tuvo 45 recepciones para 544 yardas y seis touchdowns antes de la lesión. Hace dos temporadas, fue seleccionado All-Pro del primer equipo después de atrapar 107 pases para 1,361 yardas.
El ala cerrada de segundo año, Isaiah Likely, ha prosperado en ausencia de Andrews, atrapando 21 balones para 322 yardas y cinco touchdowns en seis juegos. Los Ravens terminaron 5-1 en ausencia de Andrews.
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